Admin 15 agosto, 2021

A los 3 minutos del complemento, el lateral del Fortín le cometió una infracción dentro del área al jugador del Millonario

El encuentro en el Estadio Monumental entre River Plate y Vélez Sarsfield carecía de emociones. De un lado y el otro habían hecho poco para romper el cero que prevaleció durante toda la primera etapa en este encuentro correspondiente a la 6ª fecha de la Liga Profesional. Hasta que una acción en el área rompió la monotonía en el tanteador.

A los 3 minutos del complemento, Milton Casco apareció en libertad por el carril derecho dirigiéndose en diagonal rumbo al área. El defensor del Millonario recibió el pase de Matías Suárez y alcanzó a puntear la pelota antes que el lateral del Fortín Francisco Ortega, quien cruzó al hombre del equipo de Marcelo Gallardo.

El árbitro Pablo Echavarría no dudó y pitó el penal, una decisión correcta por la falta imprudente del deportista de Vélez. Esta acción se enmarca dentro de aquellas en las que un jugador muestra falta de atención o de consideración o actúa sin precaución al disputar el balón con un adversario. Aunque no es una situación que necesariamente requiera de la amonestación, decisión correcta también del juez ya que no mostró la tarjeta. El otro gran interrogante también se disipó con facilidad: Casco estaba dentro del área cuando Ortega le cometió la falta.

Esta pena máxima significó la apertura del marcador de Núñez: el mediocampista Enzo Fernández se hizo cargo del disparo desde los doce pasos y celebró por primera vez un gol con la camiseta de River. Hasta esta presentación, su única anotación se había dado durante su estadía en Defensa y Justicia cuando le hizo un gol al Bahía de Brasil en un triunfo por 3-2 en la Copa Sudamericana.

No fue el único hecho dentro del área que requirió de la atención del juez. A la media hora del primer tiempo, Juan Martín Lucero intentó enviar un centro al área de River pero la pelota impactó en Paulo Díaz. El atacante del Fortín reclamó un supuesto penal por mano, pero fue acertada la decisión del árbitro de dejar continuar la acción porque el brazo estaba pegado al cuerpo y acompañaba el movimiento natural.